Sega puede que ya no sea un competidor en la actual guerra de consolas. Pero su reputación como marca de entretenimientos electrónicos –sólo pensemos en su mascota, Sonic– sigue intacta.
Es más, pensemos que una de sus consolas más queridas, la Dreamcast, hace poco estuvo de cumpleaños y aún sigue siendo venerada como un objeto de culto.
Pero la marca Sega -tal como todavía lo es Atari-, sigue siendo respetada por la gente. A tal punto es el fantaismo de algunos, que acaba de abrir un fastuoso parque temático nada menos que en Dubai, acaso la ciudad más rica del mundo…