Hoy veo en las noticas sobre la tradicional «quema de monos» que se hace en algunas ciudades chilenas para despedir el año y su mala onda. ¿Y cual fue uno de los el monos elegidos en la norteña ciudad de Antofagasta? Nada más y nada menos que el obeso Eric Cartman, de South Park. No Pinochet ni Hussein, ¡pero Cartman! Eso es lo que yo llamo cultura pop.
A propósito, hoy se conmemora el nacimiento del juego de South Park para el viejo Nintendo 64, acaso uno de los títulos más pencas y fomes y que menos justicia le podrían haber hecho a la serie. Desde entonces, nunca ha habido un nuevo juego basado en la soberbia serie animada de Matt Stone y Trey Parker.
¿Será la nueva generación la oportunidad? ¿O a lo mejor un juego de rol tipo World of Warcraft? Veremos…