De esas noticias que no creo que a mucha gente le interese, se ha producido una nueva e interesante movida estratétiga en la industria del juego de video. Resulta que el Intel, el gigante de los procesadores y de la clásica músiquita, ha comprado Havoc en la nada despreciable suma de 110 millones de dólares.
Ahora, la pregunta del millón: ¿qué diantres es Havoc? Es lógico que no se tenga idea de qué se trata, pero de seguro lo han visto. En más de un juego, en los créditos del comienzo. ¿Les suena, no?
Pues bien, (y aquí cito a Vida Extra) «Havoc se especializa en la creación de herramientas de desarrollo para dotar de física a los videojuegos, así como recrear las interacciones entre objetos y personajes del juego. Por lo que detecta colisiones, gravedad, masa y velocidad en tiempo real llegando a recrear ambientes mucho más realistas y naturales». ¿Queda claro?
Obviamente que las aplicaciones de Havoc no sólo se restringen al mundo de los videojuegos, pero está claro que éstos son una parte importantísima de su desarrollo.
El detalle interesante es constatar que los juegos para PC seguirán con vida, acaso como una verdadera opción más frente a las consolas. Auqnue está claro: estas últimas definitivamente son más acequibles que un computador high end. Es el costo de la excelencia, supongo.