Reseñas·Videojuegos

Ninja Gaiden II: Voy a Perder la Cabeza por tu Amor

Especificaciones técnicas

  • Estudio Team Ninja
  • Publisher Microsoft Game Studios
  • Plataformas Xbox 360

La situación es la siguiente: estuve prácticamente todo el fin de semana jugando Ninja Gaiden II. Todo bien.

El juego es apasionante, visualmente muy atractivo, entretenido, violento y todos esos comentarios que hacen que se disfruten un juego. Incluso, ha tenido objetivamente buenos comentarios. Hasta ahi, todo bien.

El problema se presenta a la hora de enfrentar a los bosses.

Y claro, puede ser que al final de las primeras etapas no cueste tanto superarlos. Pero inevitablemente llegará un punto en donde no podrás pasar a algún boss. Estamos hablando de que aún utilizando un faq o un cheat, no se puede superar.

En mi caso, ese maldito punto llegó al final de la tercera etapa del juego. Todo iba bien hasta que me tocó enfrentarme al boss de la tercera etapa, un tal Demon Train, una especie de monstruo metálico en forma de tren eléctrico, muy freak, y muy mañoso de matar.

Lo intenté de varias maneras y nada, hasta ahora no he podido superarlo. Es más, me entero de que es el boss más apestoso de todo el juego, según opiniones de algunos foros.

¿Qué pasa? Pasa que simplemente llegas a un punto de frustración en donde simplemente no puedes seguir avanzando. Y tiras el control por la ventana y apagas la consola con rabia y todavía más frustración.

Pasa el rato, te calmas. Quieres seguir jugando, saber qué nuevos escenarios y villanos aguradan. Pero no. Vuelves a pelear con el boss y te sigue machacando donde mismo. Resultado: vuelves a tirar a la cresta el control y pones el Grand Theft Auto.

Pregunta: ¿cómo puede ser que considerando la actual arquitectura de un videojuego, éste pueda perder toda su vida útil debido a que un mono no te dejó avanzar más? O sea, ¿es ese el final del juego? No debiera ser.

Si Team Ninja, desarrolladores del juego, hubiesen sido más considerados, en primer lugar quizás no deberían haber generado una curva de dificultad tan bruta; y segundo, hubisese sido lindo que existiera la posibilidad de proseguir por otro lado en caso de quedarse pegado. Como sí sucede con el Grand Theft Auto.

Ahora, no quiero que se me malinterprete: el juego es bueno. Incluso muy bueno. Pero es impresentable que a estas alturas del partido exista un valla que no te permita avanzar en el juego. Porque así, todos perdemos.