Especificaciones técnicas
- Estudio Nintendo EAD
- Publisher Nintendo
- Plataformas Wii U, Nintendo Switch
Es cierto que Nintendo, ad portas a las nuevas consolas de próxima generación de sus competidores, está atravesando una especie de limbo en que, amparado por el universo de sus personajes y su sello único, ha logrado aferrarse a su público más fiel, es decir, ese grupo etario más bien adolescente o derechamente infantil.
Porque a estas alturas, no debiera ser una sorpresa que Nintendo no tendrá el mismo impacto que generó el ciclo anterior con su revolucionaria Wii. En vez, con la Wii U muchos sentencian –me incluyo– que Nintendo simplemente se puso al día con las actuales consolas y que el control/tableta es lo único realmente innovador. Y hasta cierto punto.
La estrategia de Nintendo, entonces, es ampararse en sus títulos y en el universo de sus personajes para dejar contento y cautivo a su público. Y si bien a la Wii U no le ha ido como a Nintendo le habría gustado, es innegable el éxito de ventas que ha tenido la consola portátil 3DS.
Además, la fervorosa recepción hacia la marca en el pasado FestiGame 2013 fue un gran ejemplo de fidelidad. En especial, justamente con ese público más infantil.
En ese sentido, los juegos de Nintendo poseen una particularidad que muy pocas veces logran otras plataformas: ese efecto relajante y hasta zen de sus juegos. Presentaciones, bandas de sonido, paleta de colores, personajes, etc.
Es cierto, casi todo los títulos de la japonesa todos tiene un molde que apela principalmente a un target más adolescente/infantil.
Pero lo anterior no quiere decir que un público más adulto le pueda sacar provecho a eso. Como en el caso del Pikmin 3, franquicia de la compañía en su tercer capítulo, que no es más que un juego de estrategia en tiempo real muy bien articulado y definitivamente plácido.
Pero más allá de la mecánica de juego, eso es justamente lo que éste proyecta: sensación de paz, calma y relajo. Es cierto que hay veces que uno busca desahogarse manejando como energúmeno o acribillando enemigos en un escenario bélico.
Pero esto es relajo de verdad que, de paso, hace trabajar el mate. Y eso algo en lo que Nintendo casi no tiene competencia.