La nueva adición al portafolio de smartphones de la multinacional china destaca en muchas cosas. Pero donde realmente sobresale es en su set fotográfico impulsado por inteligencia artificial.
En la paradisíaca isla de Saint Maarten, en pleno Mar Caribe, la multinacional de origen chino presentó su nueva línea 400 de smartphones de gama media-alta en un entorno tropical y rodeado de un hipnótico mar turquesa.
Pero no fue todo ya que la marca además profundizó en una de sus características más llamativas: su set fotográfico en donde no sólo destaca un potente foco de 200 MP como lente principal, sino que también ostenta un set de post producción empapado de funcionalidades basadas en la inteligencia artificial.
Aunque en términos generales, la gran gracia de este modelo es que incluye muy buenas especificaciones en todas sus áreas, pero sin presentarse como un tope de línea. En ese sentido es una interesante alternativa para quienes no deseen superar el millón de pesos en un buen smartphone. Pasemos a revisarlo.
Primeras Impresiones
En términos generales, el Honor 400 Pro continúa la senda de sus generaciones anteriores. Es decir, estamos frente a un modelo que reúne lo mejor en términos de especificaciones, pero dentro de un chasis más bien tradicional, discreto, pero efectivo. Tomarlo en la mano resulta cómodo y sus poco más de 200 gramos casi no se sienten.
Su pantalla es AMOLED y se expande a los tradicionales 6,7” de tamaño y alcanza los 5.0000 nits de brillo, lo que es bastante. Su diseño es tradicional y sólo viene en un solo color: gris lunar.
Sus especificaciones están al día. Como motor, cuenta con un potente procesador Snapdragon 8 Gen 3, con 12 GB de memoria y hasta con 512 GB de almacenamiento, mientras que su carga alcanza los 100 W con un batería de 6.000 mAh.
En ese sentido, su funcionalidad, autonomía y rapidez están garantizados. A su vez, el teléfono es capaz de ser cargado de 0 a 100 en menos de una hora.
Fotografía Mágica
Acá es definitivamente donde el teléfono brilla. Su lente principal destaca con 200 MP, además de incluir un sensor ultra nítido de 1/1.4”, un gran angular de 12 MP y un teleobjetivo de 50 MP con zoom digital de hasta 50X.
Podríamos seguir en cuanto a los detalles técnicos de los lentes. Pero lo que verdaderamente sorprende es la cantidad de funcionalidades de posproducción que permite el set de herramientas impulsadas con inteligencia artificial de Honor.
Tenemos el cada vez más necesario borrador digital de objetos o personas. Ese que con sólo pasar el dedo, el sistema borra íntegramente lo no deseado, sin que se note en lo más mínimo. Las fotos como prueba testimonial ya son cosa del pasado.
Pero más sorprendente es la funcionalidad de imagen a video que, con sólo subir una foto estática, da lo mismo su contenido, el sistema -en menos de un minuto a través de una conexión a la nube- es capaz de transformar algo estático en un mini video de cinco segundos.
Otro gran detalle es la función súper zoom, ya que, gracias a la IA, al momento de acercar el objetivo en la pantalla, el sistema automáticamente estabiliza la toma para luego mejorarla como corresponde, dejando de lado todos los elementos borrosos que usualmente se asocian con este tipo de fotos.
En definitiva, un buen smartphone, que cumple en todas sus especificaciones, pero que destaca sobremanera en sus modalidades y herramientas fotográficas.