El último plegable de la compañía es la culminación de años de perfeccionamiento. Por eso, es quizás uno de los mejores flips dentro del mercado de smartphones.
Motorola hace años que se ha esmerado no sólo en posicionarse como un actor global dentro del competitivo mercado de smartphones; además, se ha esmerado en crear acaso uno d ellos mejores modelos de smartphones plegables estilo flip.
Su presencia en la región se ha ido solidificando y hoy ya son la segunda marca más vendida en Chile durante esta temporada, de la mano del éxito que ha tenido su otra familia, la Edge.
Pero más específicamente, el nuevo Motorola Razr 60 Ultra -el actual tope de línea de la marca- es la culminación de un modelo muy de nicho, pero que cada vez va ganando más adeptos.
Porque si bien los modelos plegables aún están en general sobre la barrera de los mil dólares, cada vez más marcas suman plegables a sus portafolios. La demanda existe.
Así, vemos que marcas como Xiaomi, Nubia y claro, Samsung, se van sumando a la tendencia de los plegables flip, cada una de ellas con interesantes propuestas que van mejorando año a año. Todo esto, sin siquiera considerar los que ofrecen los teléfonos fold (tipo libro).
Motorola lanzó hace poco, con bombos y platillos en Nueva York, su nueva generación de productos para este 2025, en donde por supuesto el Razr 60 Ultra fue la vedette principal dentro de la presentación, que además incluyó los nuevos modelos de su línea Edge, además de wearables y otros accesorios.
Lo hemos estado probado estas últimas semanas y estás son mis impresiones.
Primeras Impresiones: Delgado y Liviano
Fuera de la caja, tenemos un muy delgado teléfono con de pantalla AMOLED LTPO de 7” súper HD, brillo máximo de 4.500 nits y una tasa de refresco de 165 Hz, lo que es alto para este tipo de pantallas.
Más fluidez, aunque sea principalmente para videojuegos, siempre es bienvenida dentro de una pantalla, aunque quizás hay que reconocer que, desplegado, el Razr 60 Ultra es algo “estirado” para ser usado con una sola mano y el formato resulte algo anómalo para llegar a los lugares más altos. Pero nada grave.
Por otro lado, para los interesados, el pliegue en la mitad realmente apenas se ve. Si, se nota si uno se fija, pero de verdad que uno se olvida en instantes. Personalmente, no me molestó para nada.
Cerrado, mientras, contamos con una gran pantalla de 4” pOLED, de la que ya profundizaremos.
La construcción del Razr se basa en un chasis de aluminio y plástico, con bisagra de titanio, que se siente resistente para su funcionalidad, pero igual el teléfono invita a que sea manipulado con cuidado. Y ayuda mucho que el pack venga con un cobertor de silicona para su protección.
De hecho, no es muy distinto a lo que es la construcción de sus generaciones anteriores, pero se nota que Motorola ha pulido todo los detalles y recovecos posibles.
El modelo es delgado, insistimos y muy liviano: menos de 200 gramos. Se siente bien y cómodo y al momento de abrirlo, la pantalla y sus contenidos son desplegados de una manera muy agradable y cómoda.
Los nuevos acabados son muy atractivos también. O, al menos, es de los más original e innovador que hemos visto últimamente en términos de diseño exterior en celulares.
Motorola ha tomado esta variable muy en serio, no sólo por su asociación con Pantone, sino también con Swaroski y en la textura de esta nueva generación.
Además, también hay que destacar el botón personalizable ubicado al costado izquierdo del cuerpo, con el fin de activar la plataforma de inteligencia artificial. ¿Sirve? Creo que va a depender exclusivamente del usuario.
Personalmente, me tocó el acabado de madera que, efectivamente le da un toque de frescura al teléfono, aunque me habría gustado más probar el original acabo alcántara, que es como una especie de felpa gamuzada, muy atractiva al tacto.
Por cierto, posee certificación IP48, lo que lo hace resistente al polvo y sumergible hasta 1,5 metros por hasta 30 minutos. Y las pantallas cuentan con protección Gorilla Glass.
La Pantallita que Todo lo Puede
Por supuesto, su pantalla externa es quizás lo más llamativo del Razr. Claro, porque más allá de mostrar información, la pantallita permite operar el teléfono prácticamente en su totalidad.
Hay que decir que plegado el Razr funciona de una manera muy cómoda, en donde su pantalla permite operar el celular en todas sus posibilidades, incluso fotográficas.
La gran mayoría de las apps, independiente de su uso, pueden ser desplegada en esas 4”, incluyendo WhatsApp, YouTube, Instagram o Flipboard. Apps, no widgets, que funcionan con los mismos gestos tradicionales del sistema.
Por cierto, los widgets o “paneles” son la esencia de la dinámica de la esa pantalla. Más rápido y a la mano, la idea es llegar lo más rápido posible a lo necesario. Clima, agenda, Spotify, atajos varios también están disponibles. Hasta mini videojuegos (que de verdad dan para tema aparte).
¿Mi favorito? El widget de música, que muestra una tornamesa con el disco sonando mientras da vueltas. Retro.
Bajo el Capó: Procesador de Última Generación
Por dentro, el aparato cuenta con un procesador Snapdragon 8 Elite, ahora sí, el más potente actualmente en el mercado. Bien ahí, porque sumado a sus 16 GB de memoria y hasta su 1 TB de almacenamiento, la performance está asegurada.
Como siempre, el modelo viene actualizado con Android 15 y presenta una muy liviana nueva capa llamada Hello UI, aunque sigue siendo una experiencia de uso lo más cercana a lo que propone Google, con hasta cuatro años de parches de seguridad garantizados.
No hay tiendas especiales ni aplicaciones dobles, salvo un par de aplicaciones de asistencia y personalización de la marca.
Por el contrario, ya fuera de la caja la experiencia es muy limpia y liviana. O vainilla. Y el nivel de personalización del aparato es sumamente profundo, además.
Lo que sí está mejorado es la batería que se amplía de 4.000 a 4.700 mAh, mientras que su carga rápida aumenta a 68W enchufado y 30W de carga inalámbrica, con 5W de carga inversa.
Fotografía Flexible
En el apartado fotográfico,la Ultra cuenta con un sistema de tres cámaras de 50 MP con Dolby Vision. En general, el resultado es aceptable, pero sigue siendo un tema que reforzar en futuras iteraciones.
En verdad, la verdadera gracias del sistema son las posibilidades que ofrece su diseño. Desde dejar apoyado el teléfono para grabar un video a usar la cámara como si fuese una (vieja) grabadora de video, son los momentos en que el form factor del smartphone brilla.
O cuando el celular está cerrado y sólo con un movimiento de muñeca es posible “despertar” la cámara para sacar disparos inmediatos.
Inteligencia Artificial: Al Debe
De la misma manera, el teléfono viene aperado con un fuerte acento dedicado a la inteligencia artificial, tanto así, que Motorola incluso decidió dedicarle un botón especialmente para ejecutar el asistente.
ParaSer honestos, al asistente en cuestión lo encontré de muy poca utilidad. En términos de estar efectivamente entrelazado con el sistema operativo, sólo me encontré con una pequeña caja de búsquedas que me daba la opción de “ponerme al día” o “tomas apuntes”.
Fuera de eso, no mucho más de lo que hemos visto con otros fabricantes, que tampoco ha sido mucho, más allá de que el software del teléfono incluya de manera nativa aplicaciones como ChatGPT, Gemini o Copilot.
Porque hay que reconocer que implementar IA de manera orgánica en el sistema, así como se muestra en algunos videos, es algo que muy pocas marcas en verdad han logrado implementar de manera efectiva.
Experiencia de Uso
Es acá donde realmente uno se detiene a pensar si este tipo de dispositivos es el que uno realmente usa. Por lo pronto, el hecho de comprimir el teléfono automáticamente lo hace un favorito para ser llevado en bolsillos estrechos o espacios similares.
De la misma manera, la versatilidad que ofrece su pantalla exterior es notable. Como decíamos, todo se puede ejecutar en esa pantalla, por lo que abrirla realmente se puede transformar en algo secundario. Seguro, ocupar WhatsApp en todo su esplendor no es lo mismo, pero todos las funcionalidades y la visualización están ahí.
Así, ya sea para ocuparlo para apoyo para grabar un video o para revisar rápidamente alguna notificación y responderla sin abrir el teléfono, la versatilidad de un plegable es tan amplia como es la imaginación del usuario.
Lo que está claro: nada reemplaza el dramatismo de terminar una llamada telefónica y cerrar con estilo el celular.
A continuación, mis impresiones del Motorola Razr Ultra 60 en YouTube.