Hacía tiempo que un videojuego no sólo me hiciera enganchar de tal manera, que apagar la consola era algo imposible. Una etapa más y ya. Una más. Hasta que lo terminé en una semana. De puro curioso con la historia y de puro enviciado que estaba con el Dead Space.
Es tarde para reseñarlo, lo sé. Es un juego que salió a fines del año pasado. En su momento, de hecho, jugué el demo, que me gustó y todo. Pero ya. No fue tan potente como para querer tenerlo. Hasta que, meses después, me lo prestaron. Y vaya que ese demo no le hacía justicia al juego completo.
La razones, impresiones, secuelas, la nueva version para la Wii y otras hierbas, después del salto…