

Cuando uno era chico y celebraba cumpleaños en patota con «entretenciones» en el menú (títeres, póngale la cola al burro, piñatas, etc.), creo que los magos eran los que más se repetían.
Algunos salvaban, la mayoría era una lata (sobre todo los chistocitos) y otros, más osados, te dejaban en ridículo (como cuando por arte de «magia» te sacaban los calzoncillos). Ya no más.
Hoy, en vez de tener esos magos ridículos, los cabros chicos actualmente la tienen mucho más fácil.
Si no, vean el trabajo de este tipo, que se encarga de hacer monos con globos. Pero no jirafas ni perros salchicha. En vez, el tipo le hace a Master Chief, Mario, Transformers, Tortugas Ninja y una variopinta selección de monos ñoños.
Ideal para cumpleaños en donde, em, los cabros chicos prefieren ir a jugar videojuegos antes que a la gallinita ciega.