[Reseña] Astro Bot: La Perfección de lo Simple

Con justa razón, este nuevo y esperado videojuego exclusivo de PlayStation ya se está erigiendo como el título del año. Por acá creemos que tiene todos los pergaminos para serlo.

Por Alejandro Alaluf

 

Fue en el 2020, poco después del lanzamiento global de la PlayStation 5, que un minijuego que venía incluido dentro de la consola -en rigor, se trataba de un tech demo-, sorprendió y dejó boquiabierto a todo el mundo.

Se trataba del Astro’s Playroom, una colorida representación técnica y visual de todas las bondades posibles que es capaz de ofrecer la PlayStation 5. Desde gráficos imposiblemente deliciosos, en 4K, con trazado de rayos y todo, a las múltiples posibilidades interactivas que ofrece el nuevo control DualSense, el juego trascendió por lejos a su idea original.

Este era una muy tierna, breve y colorida aventura de plataformas protagonizada por el epónimo robotito (¿la nueva mascota de la marca?), amén de que la experiencia terminaba siendo como una especie de homenaje y hasta museo de las distintas generaciones de consolas y accesorios de la historia de PlayStation. Encontrarlas a lo largo del juego era hasta emocionante.

Así, posiblemente Team Asobi, el equipo japonés desarrollador del juego, jamás se imaginó que el impacto del minijuego traería tantas loas y clamores de parte de los usuarios para que el grupo desarrollara una nueva aventura, de mayor duración y alcance. En el fondo, un videojuego en serio, pero manteniendo la misma esencia y mecánicas del original.

Salvo un minijuego similar, previamente disponible, pero pensando para la PSVR, la plataforma de realidad virtual de la consola, tuvieron que pasar casi cuatro años para que finalmente la petición se hiciera realidad.

Ahora sí con una aventura completa, hecha y derecha, Astro Bot, el nuevo título, no tuvo muchos problemas para volver a cautivar y encantar a su audiencia, sino que también, fácilmente, se ha encumbrado en uno de los videojuegos mejor reseñados de lo que va del año, transformándolo, de inmediato, en uno de los serios candidatos a videojuego del año.

 

Los Pergaminos

Lo que ofrece el juego no es muy distinto a su símil original. Es sólo que hay más, muchísimo más. La mecánica son desafíos de plataforma en 3D y la estructura del juego está establecida por galaxias a las que el protagonista debe viajar para recolectar robotitos perdidos, esparcidos en múltiples planetas, además de otros coleccionables.

Por supuesto, visualmente el juego ofrece todo lo que se podría esperar: escenarios exuberantes, ultra coloridos y vibrantes, que van desde entornos helados, tropicales o de estilo cyberpunk o de temática japonesa. Hay de todo en verdad, y el juego, sólo por eso, resulta profundamente encantador e hipnótico para cualquier edad.

Por otro lado, las virtudes del DualSense nuevamente hacen destacar la interactividad profunda que tiene el juego. Las texturas en donde Astro se mueve, por ejemplo, se sienten con un nivel de detalle y rigurosidad que le dan un nuevo entendimiento a la palabra inmersión. Junto con ello, mecánicas de juego como soplar, agitar el control o presionar de tal manera los gatillos para lograr objetivos específicos están de vuelta, nuevamente están aplicadas a la perfección.

El juego no busca ser más que una muy efectiva y pulidísima aventura de plataformas, no muy difícil de dominar, y que de inmediato se posiciona con clásicos como Crash Bandicoot o Spyro. Además, como también era de esperar, el camino está repleto de sorpresas, cameos y nostálgicas referencias a clásicos de Sony. Y no haremos spoiler alguno al respecto.

Y si bien la aventura es sólo para un jugador, es una experiencia que invita a ser disfrutada absolutamente en familia, como en los viejos buenos tiempos de los clásicos de Nintendo durante los años 90s. O como también pasó con el Atari, una década antes.

 

El Veredicto

El objetivo de Astro Bot es sencillo: lograr alegría en el jugador. Y vaya que lo logra. Junto con todo lo demás, la dificultad del juego es lo de menos. Lo que importa, al final, es la experiencia de diversión, jolgorio y escapismo a un nivel que pocas veces se ha visto en un videojuego durante lois últimos años.

En ese sentido, el aporte de entretenimiento para grandes y chicos que entrega Astro Bot va mucho más allá que se run buen videojuego, fiel a los tiempos que corren y a las posibilidades técnicas que tiene a la mano. Es un juego con corazón. Que genera felicidad, incluso.

En un año más bien raro para la industria de videojuegos, dónde muy pocos títulos han logrado destacar, un sencillo título de plataformas ya comienza a transformarse en el videojuego más entretenido y querido de este 2024. Sorpresa.