Tuve la oportunidad de probar el demo del Star Wars: The Force Unleashed en un PlayStation 3 y tengo que decir que el juego fue sumamente agradable de jugar. Por todos lados, destila calidad y provoca continuamente muecas en donde se termina diciendo "cool, este juego funciona".
Categoría: Reseñas
CRYSIS: MAXIMUM GAME
Terminé el Crysis. Y me siento un poco viudo. Porque desde el Call of Duty 4 -y dejando de lado el Grand Theft Auto IV, sin duda el juego del 2008– pocas veces un juego me había atrapado tanto. Y en el computador. Porque claro, ha pasado demasiado tiempo desde que jugué a algo en serio en un PC. Y el tema fue hablado largamente cuando el juego salió a la calle, en noviembre del 2007.
Considerando los escasos títulos que han aparecido este año en formato PC, y la tendencia que dicta que la mayoría de los gamers están apostando por consolas (por inmediatez, costos fijos, librería de títulos, etc.), personalmente creo que el Crysis podría ser el último GRAN título (exclusivo) para PC; pero además, uno de los mejores fps que he tenido el placer de disfrutar. No por nada, el juego ha logrado vender más de 3 millones de copias en todo el mundo. Eso, sin contar las miles de copias pirateadas que circulan por la red…
Es más, me queda la duda si al final del día me gusta más el CoD 4 o el Crysis. Ambos están soberbiamente hechos, seguro. Pero el Crysis posee un aire épico/cinematográfico sumamente atractivo. De hecho, la (criticada) historia a mi no me pareció tan mala ni tan simplona. No es material para Hollywood, ok, pero sí tiene todo el potencial para serlo: los primeros encuentros con las fuerzas coreanas, el misterioso encuentro extraterrestre y la batalla final sobre el portaaviones son escenarios que producen escalofríos y conducen fluidamente la historia.
Y si a eso le sumamos que el juego posee los mejores gráficos que he visto hasta ahora (no en mi computador, por cierto), la experiencia es demasiado enriquecedora y satisfactoria. El nivel de detalles, de vistas, de ambientación, todo es fenomenal y ultra minucioso. Y si están los requermientos técnicos necesraios, además de una pantallla de generosas dimensiones, el espectáculo puede llegar a ser de verdad único.
Quizás lo más fascinante del juego es el comportamiento de los enemigos. La inteligencia artificial (AI) de los monos en genral es sumamente creible y en ese sentido, la alemana Crytek hizo un trabajo de joyería. No sólo por el comportamiento enemigo antes de que seas sorprendido (conversando, saludando a superiores, meando, etc.), sino que al momento de descubrirte por cualquier tontera (la mira láser, la linterna, aparecer a campo abierto), los malos se reagrupan, se esconden, cubren, y se ponen a gritar como locos. Muy realista el comportamiento de los coreanitos.
Las armas y los vehículos creo que fueron absolutamente satisfactorios. Muy balanceados. Por un lado, conducirlos -en vistas en primera y tercera persona- fue muy agradable y útil, mientras que el arsenal y la particular customización de armas permitía dejar satisfecho al más reclamón.
Por otro lado, el personaje protagonista –Nomad– no es un modelo de caracterización, pero es atractivo, al igual que el traje, el famoso nanosuit. Curiosamente, el personaje que más atrae por personalidad es uno de los aliados d elas Fuerzas Especiales, Psycho, que justamente será el protagonista de la secuela del juego. A propósito, ahora resta esperar qué depara el famoso Crysis Warhead (extensión independiente del juego original), que saldría en un par de semanas más, y ver si lo que ha dicho Crytek sobre una trilogía basada en el universo Crysis será o no cierta. Ojalá sí lo sea.
Por lo pronto, el Crysis ya se ha ganado un sitial especial en el corazoncito de este redactor. Maximum game!
TOO HUMAN: MORE HUMAN THAN HUMAN
El título, claro, hace alusión a ese clásico noventero de White Zombie. Pero hasta ahí llegan las similitudes de este juego que se demoró diez años –¡una década!– en ver la luz del día. Casi como el caso del Duke Nukem Forever. Pero más piola. Y en este caso, por lo menos, el juego finalmente sí salió.
Desarrollado por la canadiense Silicon Knights, el juego inicialmente mostrado en la feria E3 de 1999 como un proyecto de cuatro discos, exclusivo para PlayStation. Al poco tiempo, el juego cambió de manos y pasó a Nintendo. Y ahí quedó el proyecto… durmiendo. Eso, hasta el 2005, cuando la desarrolladora anunció una alianza con Microsoft para hacer un triología exclusiva para la Xbox 360.
Forward a agosto del 2008. Estamos en las oficinas de Microsoft Chile para probar finalmente el juego, que debuta esta semana en Chile y el mundo. Y el resultado es un tanto dispar. O más bien, genérico. Porque uno se imagina que si el juego se demoró 10 años en realizarse, uno supone que el tiempo invertido debiera verse reflejado en los gráficos, la jugabilidad, las cinemáticas, etc. Pero no.
Too Human es un hack’n slash futurista en tercera persona con un fuerte sabor a rpg. De lo que se puede intuir, la historia versa sobre dioses nórdicos cibernéticos (!) y Baldur, hijo de Odín y protagonista del juego. Esta gente vela por la raza humana ad portas a una invásión de máquinas sedientas de sangre. La verdad es que la historia es muchísimo más alamabicada, compleja e inentendible que esto, pero por ahí va la cosa. Creo.
El resultado, como decíamos, es promedio. No sólo por la historia. Las cinemáticas que acompañan al juego no aportan demasiado (más bien confunden) y los combates son algo repetitivos. Lo iunteresnate son justameneten los detalles sacados de algún juego de rol: las clases de combatientes, la actualización y upgrade de armas y habilidades, acumulación de tesoros, etc.
Quizás lo más interesantes sean los modos de combate, en donde se mezcla ataques de armas en mano (o melée), que incluyen espadas, martillos y cuanto tontera se imagine, mezclado con pistolas, rifles, lásers y todo eso. O sea, para todos los gustos.
Así mismo, las críticas de la prensa esdpecializada también han sido dispares, aunque inclinándose más hacia lo positivo. Metacritic, hasta ahora, le da un un puntaje de 68 a las reseñas obtenidas. No está mal. Pero pudo haber sido mejor. Mucho mejor.
TIMESHIFT: CHANTA LA MOTO
Este juego, realizado por el estudio ruso-norteamericano Saber Interactive, fue de aquellos proyectos que estuvieron en el papel por más tiempo del que uno hubiese querido. Problemas varios durante su desarrollo se encargaron de llenarlo de rumores y fechas que se iban posponiendo. Hasta que finalmente le jueguito vio la luz y, bueno, todo finalmente fue mucho ruido y pocas nueces. Pero las pocas nueces, digámoslo desde ya, no están nada de mal.
El Timeshift en un shooter de ciencia ficción en primera persona que se nutre de otros juegos que recorren la misma senda post apocalíptico-futurística, como la saga Half-Life. Pero con clima lluvioso. En este caso, la historia y la ambientación del juego, si bien están logrados –sobretodo los escenarios al aire libre– no pasan de ser finalmente lugares genéricos para ejercitar disparos y explosiones. De la misma manera, los enemigos son soldados humanos revestidos con gruesas armaduras, como ya se ha visto infinidad de veces. En ese sentido, se ha visto lo mismo, mejor hecho.
Pero la gran gracia del Timeshift es, como se nombre en inglés lo indica, la posibilidad de manipular el tiempo. Tal cual. Porque el cibernético traje del protagonista le permite al jugador ralentizar, detener o derechamente revertir el tiempo. Literalmente.
Este truquito, matizado con excelentes efectos especiales, es lo que le da el plus de originalidad al juego, al tener la posibilidad de contar con múltiples maneras de acercarte a tus enemigos y aniquilarlos sin que se den cuenta.
Lo mejor: robarles las armas y, una vez que el tiempo se restaura, ver sus caras de asombro al constatar que “alguien” le robó sus metralletas, para luego reventarles la cara de un escopetazo en la nariz. Notable.
WEEKEND ROUNDUP: FPS EXTRAVAGANZA EDITION
Estoy rodeado de fps. Y me encanta. Se ha dado la casualidad -para mi alegría- de que todos los juegos que tengo actualmente a la mano son títulos en primera persona. Y shooters. Todo, a dos bandas, yendo y viniendo entre la Xbox 360 y el PC.
Repasemos: en la consola acabo de dejar en pausa al Turning Point: Fall of Liberty, un juego que nunca cosechó mayores loas y pasó muy piola bajo el radar, pero que a mí siempre me llamó la atención el concepto del juego, así que decidí comprarlo -en oferta- durante mi pasada estadía en México.
El concepto se basa en el qué hubiera pasado sí… y el foco es que Winston Churchill, durante su visita a los EE.UU. en 1931 no hubiese podido sobrevivir a ese atropello menor que tuvo mientras cruzaba la Quinta Avenida en Nueva York. Entonces, como no hubo líder inglés, la historia tomó un curso distinto y la Alemania Nazi logró ganar y conquistar el frente europeo a tal punto de concretar una invasión de avanzada a la costa oeste norteamericana -Nueva York como blanco principal-, como si el Día D hubiese ocurrio al otro lado del Atlántico. Notable premisa, si me preguntan.
La introducción del juego es sencillamente notable: eres un obrero de la construcción que de repente, desde la altura, ve cómo decenas de aviones alemanes y paracaidistas surcan los cielos con explosiones y caos masivo. Nadie entiende nada. Y la misión es lógicamente reponerse del shock inicial, ser parte de la resistencia y acabar con la amenaza nazi. Todo bien hasta ahí.
La lata es que, efectivamente, el juego se nota que fue hecho a la rápida, con mala producción, gráficos que se vuelven feos y genéricos, pésima animación, diálogo, etc. Es decir, un juego que es más interesante leerlo que jugarlo. Igual salva, claro, especialmente para fanáticos. Pero el juego que lo reemplazó días después está notable.
Se trata del Battlefield: Bad Company. Algo había mencionado de este esperado shooter bélico que, para mi gusto, es un upgrade de los anteriores títulos de la saga, más orientados a la jugabilidad en líena y el paso por distintas clases militares. Este es un shooter que sabe que el Call of Duty 4 está hace rato afuera. Y en ese sentido, más allá de lo rutinario de las misiones -pon una bomba, defiende el pueblo, aniquila las fuerzas enemigas- salva sobre el promedio principalmente por dos cosas: sus gráficos, sus escenarios destructibles su onda tipo Los 12 del Patíbulo o Los Héroes de Kelly (o más recientemente Tres Reyes) y, principalmente, su sentido del humor. Vamos recién en la segunda o tercera misión y la cosa entretiene bastante. Me gusta.
Pero también me gusta el Crysis. ¿No lo sabían? Ja. El punto es que esta vez es el juego original, con cajita y todo. Y sí, los estoy haciendo correr en low, con los gráficos casi básicos del juego, pero aún así es un juego notable y me atrevería a decir que tiene el dudoso honor de ser el último gran fps disponible hoy en el mrcado (más adelante veremos). La historia, el escenario gigante, la isla, los detalles, su realismo es una cosa de verdad que deja sin habla. Así tanto vale la pena jugarlo, por mucho que en mi PC se vea "desaprovechado". Da lo mismo.
Y para rematar, tengo el famoso Terrorist Takedown 2 que mencionaba hace un par de días y que no he logrado hacer correr por problemas con el disco… Hmmm…. Y el Rainbow Six: Lockdown que salió la semana pasada en la colección de Cosar. Qué alegría, hay fps para rato, señores.
¿Más Call of Duty? Porque hay novedades. Ya adelantábamos que la secuela al mejor y más popular fps del último tiempo iba a volver a escenarios de la Segunda Guerra Mundial. Pues bien, ahora tenemos videos, harto rostizamiento (parece ser que los lanzallamas tendrán un rol protagónico) y declaraciones de la gente de Treyarch, que está desarollando el juego, donde explican el porqué de sus decisiones y de cómo no saldrá una versión para PlayStation 2, entre otros interesantes detalles. El video, a continuación.
Y para finalizar, vean este comercial de la Asociación Anti Tabaco de Florida, EE.UU. Para que vean, cabros, la influencia pop de estos juegos.
NINJA GAIDEN II: VOY A PERDER LA CABEZA POR TU AMOR
La situación es la siguiente: estuve prácticamente todo el fin de semana jugando Ninja Gaiden II. Todo bien. El juego es apasionante, visualmente muy atractivo, entretenido, violento y todos esos comentarios que hacen disfruta un juego. Incluso, el juego ha tenido objetivamente buenos comentarios. Hasta ahi, todo bien.
El problema se poresenta a la hora de enfrentar a los bosses. Y claro, puede ser que al final de las primeras etapas no cueste tanto superarlos. Pero inevitablemente llegará un punto en donde no podrás pasar al boss de la etapa. Estamos hablando de que aún utilizando un faq o un cheat, y aún así no se puede superar.
En mi caso, ese maldito punto llegó al final de la tercera etapa del juego. Todo iba bien hasta que me tocó enfrentarme al boss de la tercera etapa, un tal Demon Train, una especie de monstruo metálico en forma de tren eléctrico, muy freak, y muy mañoso de matar. Lo intenté de varias maneras y nada, hasta ahora no he podido superarlo. Es más, me entero de que es el boss más apestoso de todo el juego, según opiniones de algunos foros.
¿Qué pasa? Pasa que simplemente llegas a un punto de frustración en donde simplemente no puydes seguir avanzando. Y tiras el control por la ventana y apagas la consola con rabia y todavía más frustración. Pasa el rato, te calmas. Quieres seguir jugando, saber qué nuevos escenarios y villanos aguradan. Pero no. Vuelves a pelear con el boss y te sigue machacando deonde mismo. Resultado: vuelves a tirar a la cresta el control y pones el Grand Theft Auto.
Pregunta: ¿cómo puede ser que considerando la actual arquitectura de un videojuego, éste pueda perder toda su vida útil debido a que un mono no te dejó avanzar más? O sea, ¿es ese el final del juego? No debiera ser. Si Team Ninja, desarrolladores del juego, hubiesen sido más considerados, en primer lugar quizás no deberían haber generado una curva de dificultad tan bruta; y segundo, hubisese sido lindo que existiera la posibilidad de proseguir por otro lado en caso de quedarse pegado. Como sí sucede con el Grand Theft Auto.
Ahora, no quiero que se me malinterprete: el juego es bueno. Incluso muy bueno. Pero es impresentable que a estas alturas del partido exista un valla que no te permita avanzar en el juego. Porque así, todos perdemos. Además que es un detalle tan noventrero…
ASSAULT HEROES 2: MÁS VIDEOJUEGOS MADE IN CHILE
Gamers criollos seguramente recordarán que hace aproximadamente un año y medio atrás, debutó en Xbox Live el hasta ahora único juego made in Chile para consolas: el Assault Heroes. El título, un shooter futurista de vista zenital, fue desarrollado acá en Santiago por los chicos de Wanako Games. Y el juego fue un éxito, tanto en crítica (IGN lo consideró el juego arcade del año) como en descargas. Tan bien le fue que Sierra Online, distribuidor del título, le pidió a Wanako una secuela. Dicho y hecho.
Asi que casi 18 meses después, Wanako contraataca con el Assault Heroes 2. Disponible para descarga desde mediados de mayo a un valor de 800 puntos, el juego sigue la senda de su predecesor, es decir, un arcade shooter cooperativo sin mayores aspavientos que intensifica en vehículos, armas y explosiones lo que ya agradablemente ofrecía la primera parte. Además que, citando las reseñas del juego, se ve muchísimo mejor y con escenarios completamente destructibles (lo que a estas alturas ya parece ser un estándar).
El resultado hasta ahora ha sido positivo, al igual que los comentarios. Personalmente no he podido disfrutar el juego (¿cuándo va a llegar Xbox Live a Chile de una vez?), pero sé que me va a gustar. Como el primero, que me encantó. Así que kudos a Tiburcio de la Cárcova y a los chicos de Wanako. Ahora, el desafío es que de esa cantera (o cualquier otra que esté en nuestro territorio), salga con un jueguito full para consolas. Ahí sí que va a cantar Gardel…
PONTE EN FORMA: WII FIT YA ESTÁ EN CHILE
Ah, qué gusto da cuando pasan estas coas. Nintendo puede que no se la juegue mucho con sus títulos triple A (es decir, los de más alto perfil, como el Super Smash Bros. Brawl o el Mario Kart Wii), pero cuando quiere gritarle al mundo que tiene un chiche nuevo, lo hace.
El homenajeado del día del hoy fue nada menos que el Wii Fit. Ya saben, ese juego ("que más que un juego, es una experiencia", según Nintendo) en donde a través de un periférico llamado balance board (que se conecta con el Wii vía bluetooth) se pueden realizar más de 40 ejercicios distintros de acondicionamiento físico. Claro, porque el "b-board" cuantifica la masa corporal de la persona que esté encima, como una súper pesa megaenchulada. Y el resultado, a juicio inicial de este humilde redactor, es un nuevo batatazo para Nintendo.
El lanzamiento del chiche ocurrió hoy martes, al mediodía, en los salones del Museo de Artes Visuales, en la Plaza Mulato Gil. Evindentemente, estaba todo el mundo: prensa, clientes, retail, etc. Todos juntos, pero no revueltos. Un agrado. Y el lugar, óptimo para este tipo de eventos.
Un detalle dentro de la concurrencia: puedo equivocarme, pero me llamó la atención que estuvieran todos los medios grandes, entre diarios y canales de TV. Pero faltó uno: TVN. Insisto, no me consta, pero estoy casi seguro que así fue. Irónicamente, hoy en Crónicas del noticiario central 24 Horas, Consuelo Saavedra e Ivan Núñez presentaron una nota sobre el boom acrtual de los videojuegos donde, como guinda de la torta, aparecía este servidor. Ya la comentaremos…
Pero a lo nuestro, el lanzamiento. Luego de los saludos iniciales, comenzó la presentación. Los fuegos los abrió Mark Wentley, Gerente de Marketing y Ventas de Nintendo para Latinoamerica. Sí, un gringo. Pero hablaba perfecto español. Y se notaba que sabía de qué estaba hablando. Mal que mal, este lanzamiento es simultáneo en prácticamente el continente.
Luego de varios gráficos que demostraron lo que ya todos básicamente sabemos (Nintendo domina el mundo), subió al estrado Rodrigo Martínez, cerebro de la marca como representante local (vía Ecogar) para hacer una demostración del Wii Fit. El público se volvió loco. Había expectación. A continuación, una muestra de lo que fue (cortesía de Fayerwayer).
Luego, todos corrieron al segundo piso del museo a probar el jueguito en la media docena de Wiis que estaban habilitadas. La gallada se sacaba los calcetines, se subía al balance board y se reía mientras todos movían la cinturas y las piernas y chillaban de alegría. Daba gusto ver a tanta gente contenta. El suscrito, al principio reacio a probar el gadget ante tanta multitud, finalmente cedió al encanto del juego y aleteó como loco.
El dato duro: el juego -la experiencia- va a estar disponible para público el próximo 21 de mayo y tendrá un valor sugerido de $84.990 en nuestro país. El juego ya tiene varias reseñas aparecidas en medios gringos, y el resultado hasta ahora ha sido más que positivo. Era que no.
Y por cierto, el portal WiiChile tiene un acabadísimo hands-on del Wii Fit, para saber hasta el último detalle del juego sensación de esta temporada (después del GTA IV, claro).
GRAND THEFT AUTO IV MANIA (8): PRIMERAS IMPRESIONES
Lo había prometido, y bueno, (casi) he cumplido. Dije que no escribiría más sobre el Grand Theft Auto IV hasta que lo tuviera en mis manos. Pues bien, ya lo tengo (yes!), en su gloriosa versión para Xbox 360, carátula con relieve y todo. Lo conseguí durante la hora de almuerzo del viernes y tuve que bancarme toda la tarde en la pega, ansiosísimo, hasta que me pude escapar a mi casa para jugarlo. Y de ahí no paré. Por un buen, buen rato. Y varias horas después, apenas puedo decir que recién estoy comenzando el juego. Vayan entonces las primeras impresiones, hoy sábado en la mañana.
Primero que nada, el juego es GTA puro, no adulterado. Tiene todo el espíritu de los capítulos anteriores y se nota que es un producto Rockstar. Y no es un salto ultra mega sofisticado, lo que se agradece (creo). Y en ese sentido, su look & feel es perfecto y balanceado para quienes querían ver algo novedoso, más brillante, más next-gen, e ideal para quienes se acerquen a la saga por primera vez. Tiene miles y miles de pequeños detalles, chistes, diálogos y elementos –en distintos niveles– que van a arrancar sonrisas durante varias partes del juego. Rockstar style, claro. ¡Si hasta Chile sale mencionado (para variar) en una de las escenas!
Pero seré quisquilloso. Partiendo de la base de que todo el juego se ve, escucha y siente como pocos y ninguno (no por nada ha tenido puntuaciones perfectas en todos lados), me detendré en tres detalles negativos que me han llamado la atención inicialmente, luego de varias horas de juego y… para variar un poco de tanta cosa positiva.
- La conducción: Esta es probablemente la parte más importante del juego: manejar. Y más allá de que los autos, las vistas cinemáticas y los detalles de Niko manejando son para babear, la conducción de los autos es sumamente complicada. Inestable. Los virajes son demasiado sensibles, aunque asumo que con más horas de juego la cosa será asimilada. Pero en principio, manejar es complicadísimo. Uno dobla y el auto se vuelca. Casi siempre.
- Subir escaleras: Claro, se puede escalar. Pero curiosamente, Rockstar eligió el modo más engorroso posible para subir una escala. Acercarse y apretar Y y Niko sube. Suena fácil, pero uno puede perder preciosos segundos hasta que finalmente el mono comienza a escalar.
- La cámara: Ah, la clásica queja de la saga. ¿Qué sería de un juego GTA sin problemas de cámara? Acá, increíblemente, vuelve a pasar. Entonces, existen muchas situaciones en donde no podremos ver lo que queremos, la cámara se vuelve loca, no se logra “apuntar” como se debe, etc.
Eso. Y aclaro: son detalles casi menores. El resto es perfecto: el soundtrack, la historia, los diálogos (insisto, unas joyas), el mismo personaje de Niko (digno de un Oscar) y especialmente, la ciudad. Es agobiante tanta “libertad”. Pero ojo, definitivamente esa sensación era muchísimo mayor con el San Andreas, cuyo territorio era todo un estado norteamericano.
Es más: en principio, la sensación inicial que me queda es que el juego se parece más al Saints Row (se viene secuela, cabros) que al San Andreas. Y no sé si eso es bueno, malo o qué. Pero detalles menores, créanme. El juego es un must, un evento que hay que conocer y un nuevo estándar a la hora de jugar videojuegos. Rockstar, alabado seas.
Ahora, si me permiten, he de volver al juego.
GRAND THEFT AUTO IV MANIA (6)
Ya no me quedan uñas con esta espera. Siguen apareciendo más comentarios y reseñas sobe el Grand Theft Auto IV. IGN ya posteó su reseña completa y ¿adivinan? le puso un redondo 10 al juego de Rockstar. Y no sólo eso: hace 10 años que IGN no le ponía un 10 a un juego (de nuevo, insisto en jugármela por calificarlo desde ya el juego de la década). ¿Cál fue ese último 10? El Legend of Zelda: Ocarina of Time. Hace una década.
Más allá de la detallada reseña escrita, el mismo sitio tiene posetado una video reseña del juego, donde se pueden aprecir varios detalles inéditos anteriormente. Y lo que se ve de verdad es sobrecogedor. Los autos, las armas, la ciudad (que dicen, es la verdadera estrella del juego), los peatones, el humor, el cameo de Karl Langerfeld como DJ (ja!), las chicas ligeras de ropa y, sobre todo, el sistema multijugador que parece es de lujo máximo. Qué festín.
A continaución, un video más "casero" del juego muestra también varios aspectos novedosos del gameplay del juego. Lástima que el tipo de la cámara sea un imbécil. Pero igual salva para saciar la sed de curiosidad que, al menos a mí, me carcome hace semanas.
THE CLUB: EL QUE A TIROS MATA, A TIROS MUERE (O ALGO ASÍ)
The Club es un juego sencillo. Es un shooter en tercera persona que no ofrece mayores originalidades y que sólo busca entretener de buena gana. Porque su gracia radica en jugarlo en equipo, ya sea junto a un amigo o vía multiplayer. La base del juego, muy de la época de los viejos arcades, radica en un sistema de puntuaciones y combos por estilo (en
El juego es un clásico exponente de ese subgénero llamado run-and-gun, donde cubrirse o establecer tácticas de ataque no sirve de mucho. Acá la idea es correr y disparar lo más rápidamente posible. Y acumular puntos.
La historia sitúa al juego en un oscuro club ilegal controlado por un inmensamente rico y turbio archimillonario que entretiene a sus socios a través de apuestas. El pobre diablo –tú– que sobreviva más tiempo a la cacería, gana. Existen ocho candidatos sacados de un catálogo de Benneton que uno puede elegir, cada uno con distintos balances entre fuerza, precisión, rapidez y claro, su propia historia.
Ella usó mi cabeza como un revolver: la verdad es que no se me ocurre mucho qué decir sobre el juego. Porque lo encontré bastante fome. Y poco inspirador. Neeext!
Si bien la campaña para un jugador, a pesar de sus variaciones de juego, resulta mortalmente aburrida y genérica (porque existen demasiados juegos de esta onda mucho mejores y más satisfactorios), es jugando en modo cooperativo o multijugador que The Club despega. En este último modo, existen hasta nueve modalidades distintas, lo que eventualmente le podría otorgar una vida útil un poco más larga al juego. Pero eso sería.
Ojo con la carátula del juego: en la ensalada de personajes, arriba, aparece uno con los ojos tapados que no tiene nada que ver con el juego (¿o sí?), pero que sí tuvo muchísimo que ver con Chile.
SUPER SMASH BROS. BRAWL: TODO VALE
Por Mario Caruffo Madrid / Afrokid Administrador Wiichile.com
(Esta reseña sobre el juego más popular actualmente para el Nintendo Wii fue redactaba por el arriba suscrito, para la edición de abirl de la revista CeroUno. Mario se prestó gentilmente a colaborar, ya que a mí ni siquiera me mandaron un pantallazo del juego. Wena onda…)
Para los fanáticos de Nintendo, la espera llegó a su fin el domingo 9 de marzo. Ese día, con una afluencia de gente en las tiendas que pocas veces se ha podido ver con un videojuego, fue el lanzamiento de Super Smash Bros. Brawl, el juego de peleas insigne de Nintendo y uno de los más esperados del año pare el Wii. El fanatismo se tradujo en un millón de copias vendidas a dos días de su lanzamiento.
El juego ha alcanzado su popularidad no sólo por ser uno de los crossovers de videojuegos más grandes de la historia, sino también por tener un modo de juego muy simple, ya que contamos con dos botones de ataque, uno de salto y ya. Sobre esta base se van generando las combinaciones de combos y patadas. Esta tercera entrega de la serie destaca por su cantidad de personajes, incluyendo a íconos de otras empresas como son el caso de Solid Snake (Konami) y Sonic (Sega).
Se pueden elegir cuatro formas de batallar: con el mando clásico, Wiimote, Wiimote + Nunchuk y Gamecube Controller. Creo que todos aquellos que jugaron Melee se van a sentir más cómodos con ésta última opción, ya que mantiene la configuración de dicho juego. Porque si bien el Wiimote + Nunchuk es cómodo, requiere de una mayor curva de aprendizaje.
El valor de replay es increíble. Desde un sistema de trofeos (similar a los achievement de la Xbox 360), hasta la posibilidad de jugar clásicos cómo el Super Mario Bros, Super Metroid, Ice Climbers, etc. en sus versiones originales, durante un tiempo determinado. También destaca su banda sonora, una de las más grandes jamás vista, superando las 150 canciones, muchas de ellas con arreglos nuevos.
Pero lejos el mejor agregado es el “Subspace Emissary”, modo que nos trae remembranzas de los cada vez más extintos juego de plataformas horizontales, donde utilizando diferentes personajes del juego deberemos ir pasando etapas en solitario o en modo cooperativo, todo esto acompañado por secuencias de video de alta calidad que van narrando la historia.
Dentro de los aspectos negativos hay momentos de carga que a veces superan los 20 segundos, la nula optimización del wiimote y el no tener un mecanismo de voz chat en las peleas opacan un poco la performance del juego.
Smash Bros., es uno de los títulos potentes del 2008 y ha logrado sortear con éxito una tarea compleja el no quedar bajo la sombra del también popular Melee y continuar con el legado de la saga, la adición de peleas en línea (con un retraso o lag casi inexistente) y la cantidad de extras disponibles. Todo esto lo hace ser un título obligado y de lo mejor que tenemos actualmente para el catálogo del Nintendo Wii.