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Donkey Kong Jungle Beat: El Retorno del Gorila

Donkey Kong, junto con Mario, siempre ha sido uno de los grandes y más reconocibles íconos de la factoría Nintendo. Nacido en 1981 de la mano del genial Shigeru Miyamoto –también creador de Mario, Zelda y tantos personajes clásicos más– el gorilón pasó de ser el villano en su juego original (donde Mario debía rescatar a la niña mientras saltaba barriles) a ser un héroe de proporciones, junto a toda su prole. Todo, a través de su propia y siempre tropical franquicia.

Desde entonces la marca se ha centrado en mantener la esencia original del juego, lograda a través de su versión más exitosa, el Donkey Kong Country (1994) para Super Nintendo, es decir, una colorida y amable aventura desarrollado en exóticos parajes, donde el objetivo principal es recolectar plátanos. Suena extrañamente similar a otra franquicia de Nintendo, ¿no?

Ahora, sin el magnánimo poder de atracción de Mario, estamos hablando de juegos que están en un nivel un tanto inferior. Aunque no por eso menos entretenidos. De hecho, el Donkey Kong Jungle Beat en realidad viene a ser un remake del mismo nombre basado en un juego que originalmente fue editado durante el 2004 para el Gamecube, la consola que precedió a la Wii a comienzos de la década. Se jugaba con un par de bongós. De ahí el nombre.

En vez, esta nueva versión es controlada con la combinación del wiimote y su control complementario, el nunchuck. Entonces, mezclando controles tradicionales con movimientos físicos, el juego se desarrolla de manera clásica como un excelente juego de plataformas. Ni más, ni menos.

Especialmente recomendados para videojugadores de la vieja escuela, Donkey Kong Jungle Beat tuvo buenos resultados en Metacritic alcanzando un promedio de 78 puntos. Nada de mal para un juego que a fin de cuentas… es un remake con distintos controles.