Los videojuegos en Bogotá son caros. No es que tampoco haya encontrado tiendas en cualquier parte, como en Ciudad de México. Pero de lo poco que vi -un kiosko (!) en un mall y el duty free en el burócrático y desagradable aeropuerto El Dorado-, la oferta era penca y cara.
Un sólo ejemplo: el Saints Row 2, juego del 2008, estaba a ¡US$ 94! Musho.
Otro detalle es que en la tienda del duty free, sólo había juegos para PS3, Wii y Nintendo DS. Para Xbox 360 no había nada. «No salen», me dijo el perico que atendía. Qué lata. Así que no me traje nada.
Lo bueno: sí pillé el Libro de Records Guiness de Videojuegos, edición 2009 (la foto de más arriba). Es una verdadera biblia gamer y un verdadero must para cualquier fanático. Y sí, se viene la trivia.
Pero no importa. Porque ya estoy aperado con los must de la temporada. Vamos viendo.
Primero, el Modern Warfare 2. Un juego que es todo lo que se esperaba. O sea, no fue una sorpresa. Pero es un juegazo. Delivers.
Es cierto, no guarda mucha distancia con el juego original, pero la historia, ciertas secuencias espectaculares y una sensación de adrenalina compartida (si se juega en co-op, muy recomendado) lo hacen ser un juego-evento que pone de manera muy digna y alta el arte de hacer un buen videojuego. Por mi parte, tiene mi voto para lo mejor del año. Se lo merece.
En menor cuantía, pero en buenas dosis y de manera compartida, han rotado el Assassin’s Creed II y el Left 4 Dead 2. Secuelas. Buenas continuaciones.
La primera, con una remozada capa de pintura gráfica y una atractiva historia ambientada en el Renacimiento italiano lo elevan a una altura muy superior en relación a la primera parte.
Lo mismo pasa con el juego matazombies de Valve. Sobre todo cuando se juega con más amigos. Pura diversión. Y harto gore.
En cuanto a demos, en Xbox Live han salido varias cosas, pero uno me llamó la atención por lo efectivo, chulón y facilista de su concepto: Jurassic: The Hunting, un fps de Activision que no tiene mayor ciencia que hacer volaer en pedazos a diversos dinosaurios.
Como el Dino Crisis o más bien el Turok, pero en versión Quake Arena. Tengo hartos amigos que por una extraña razón rayan con el tema de los dinosaurios. Este sería el juego para ellos. No pillé la página del juego, pero sí el tráiler del mismo, en toda su gloria, por acá.
Y en cuanto a noticias, dos destacables que rescato de los pasados días. La primera, es que ya está casi fuera del horno el nuevo juego de Wanako Games (made in Chile) , los mismos creadores de los exitosos juegos Assault Heroes para Xbox 360. Casi, porque la noticia se filtró. El juego en realidad no se ha oficializada e incluso ni siquiera aparece en la página de Wanako.
Por lo que se puede apreciar, el nuevo juego también es un exclusividad, pero esta vez para la PlayStation 3. Se llama The Revenge of the Wounded Brothers y es un curioso beat’em up de la vieja escuela (tipo Double Dragon o Kung-Fu Master), con influencia nipona y con la típica trama de rescata-a-tú-polola (tipo, um, Double Dragon). Igual, se ve bastante entretenido.
La segunda, y por lejos lo más freak que se ha escuchado en el año, es la noticia del tipo que se casó con un personaje de videojuego. Así no más. Y japonés tenía que ser. La cobertura, como era de esperarse, fue amplia.
Ahora, se vienen las reseñas y listas de fin de año. Stay tuned.