Sigue el bashing al PS3. Después de la brutal crítica del New York Times, ahora es el Washington Post quien se suma a darle ventaja al Wii. A propósito, ayer sábado El Mercurio publicó íntegramente la nota del Times. Pero no sólo eso: además, en la misma sección publicaron una nota expandiendo el tema del fiasco que resultó ser la venta del primer Wii en Chile y un breve sobre la venta masiva del Gears of War, que en sólo dos semanas ya lleva un millón de copias vendidas. Por lo menos el Decano le puso a su sección “Internet / Videojuegos” (no así en su sitio web). Igual bien.
Pero no todo ha sido tan oscuro para el PS3. El portal C|Net publicó un comentario bastante positivo, y el sitio Gizmodo hizo una “frankencrítica” con comentarios de varios portales de videojuegos (gracias Manuelidades!). Hay comparaciones head-to-head en 1Up y en el sitio Computerworld. En esta página, en cambio, se comparan las dos consolas de acuerdo a las veces que se han posteado artículos en Diggs, entradas en Technorati, videos en Youtube y fotos en Flickr. Está muy interesante. Y cómo no, el gran The Onion hizo una comparación entre la dos consolas. Muy divertido.
Por si acaso, la tienda Todojuegos, que está en el clásico Shopping de Vitacura, tiene flamantes PS3 para demostración. Apenas pueda iré a ver eso, por supuesto.
Finalmente, y a propósito del primer párrafo, he estado dándole como caja al Gears of War. El juego es sumamente épico, entretenido y adictivo. La única lata es que para apreciarlo como corresponde, necesariamente hay que jugarlo en una tele HD. Y eso –diablos!– en mi caso aún no es posible.
¿Somos compades o no somos compadres?: El team del Gears of War, encabezado por el cara-de-palo Marcus Phoenix.
La historia es un tanto confusa y no dista mucho más de un guión genérico, clásico en títulos de guerra futurista. En ese sentido, uno se termina asombrando más por la parte gráfica y de jugabilidad (tipo Resident Evil 4, con cámara al hombro y updates de movimientos muy originales), más que por la historia. Pero está bien. Se perdona. Igual termina siendo un serio candidato a juego del año. Pero yo, aún así, me quedo con el Bully.
Y bien también por Microsoft. Aunque hayan partido con un año de ventaja (al parecer, finalmente sí fue una buena estrategia comercial), se anotan un gran poroto con –al fin– diseñar un juego que de verdad está a la altura de una séptima generación en HD.