En Medios·Flippers·Noticias·Videojuegos

Flippers en La Tercera


Bola Extra marcando pauta. Hoy domingo, en el diario La Tercera, en la pág. 69 de su sección de Tendencias, aparece un artículo firmado por la gran Aída Worthington, en donde da muestra del fanatismo de otro grande, Pablo Aguayo, y su sensacional salón de flippers, conocido entre los amigos como el Shangri-La de Peñalolén.

Como se puede apreciar, los flippers no son solamente objetos de culto. Son parte de colecciones y el fanatismo hacia ellos está resurgiendo de a poco. Porque, claro, difícilmente se instalarán aracdes como en los ochentas, pero lentamente la idea va creciendo.

Es más, la idea final de Aguayo, a través de su sitio Flippers.cl, es crear nada menos qun club de flipperos y rememorar aquellas inolvidables tardes ochenteras, escuchando música ad hoc y gastando fichas como loco. Porque, si me preguntan, la mayoría de los videojuegos pasan de moda. Pero jugar a un Golden Arrow o a un Twilight Zone… nunca.

Leer más

Flippers·Noticias·Videojuegos

Golden Arrow Porno

Lectores más mayorcitos de este blog de seguro habrán jugado alguna vez al mítico Golden Arrow.

Ya saben, ese flipper manufacturado por Gottlieb en 1977 que hizo sensación particularmente en Chile a fines de los setenta y principios de los ochenta.

¿No les suena? Pues ese en donde en el backglass aparece el indio con mohawk y cara de pocos amigos apuntando su arco y flecha sobre una quebrada. Todo lo que se llama un clásico.

Pues bien, este clásico acaba de alcanzar un nuevo y aún más mítico status: el de ser el primer y seguramente único flipper empleado para rodar una escena triple X. Tal cual. Y acá en Chile. Salió hoy en Las Últimas Noticias.

Esto ocurrió hace poco más de dos meses, en Peñalolén. Efectivamente, la escena se rodó sobre el flipper con una pareja de, um, actores chilenos especialmente para un equipo argentino para HBO. Todo, bajo las órdenes del experimenatdo Leonardo Barrera, cultor de este género en Chile con clásicos como Confesiones de una Ninfómana Ardiente, Hanito, El Genio del Placer y Apelación Sexual. Clásicos absolutos. Y toda la escena fue muy divertida, la verdad. ¿Que cómo lo sé? Pues porque estaba allí.

Leer más

En Medios·Flippers·Videojuegos

Gamers en TVN


Ok. Finalmente logré pillar la nota aparecida el jueves 15 en la sección Crónicas del noticiero central de TVN, 24 Horas. Está por supuesto en YouTube. Pero extrañamente, no se puede "embedear" para ponerlo en otro sitio. Curioso. Si ya quieres tu video se viralice a través de la red, ¿por qué entonces no dar todas las herramientas necesarias? Me suena raro. Así que no podré pegar el video para que lo vean desde acá. El de arriba es una mula. En vez, hagan click aquí, lo ven y continuamos con los comentarios.

¿Lo vieron? ¿Qué les pareció? Mis impresiones. La presentación de la nota, a cargo de Consuelo Saavedra, es correcta dentro de lo general, pero cae en la trampa del cliché: "aqui en Chile, más de la mitad de los jóvenes menores de 19 años confiesa jugar diariamente". Yo tengo 35 y también juego diariamente. Y creo no ser el único (espero). ¿Las mayores acaso no contamos en esto? ¿Las muestras de usuarios de videojuegos SIEMPRE tiene que ser menores de edad? No lo creo. Seguir con la tonterita de que los videojuegos = cabros chicos me parece muy provinciano y ya es hora de enfocar el fenómeno desde otra perspectiva. Sigamos.

La intro está buena, y hace la analogía entre el boom de los vidoejuegos en los 80s y las generaciones actuales. Había material de archivo de los flippers de los Bajos del York. Un clásico. Interpretativa, general, inconclusa con su analogía, pero simpática.

Pero luego, a mi juicio, la nota continúa casi de manera diabólica. Me acordé de cierta época donde los videojuegos eran casi considerados como elementos de compañía de sicópatas, pederastras y adoradores de Satán. O la clásica, en donde un gamer es considerado un freak, pero de la peor calaña. Como el que mostraron en la nota. Parece que el pobre tipo fue sacado de un casting para pillar al adolescente más espinilludo y patético posible, y que su condición fuese producida justamente por jugar demasiado: mal en el colegio, con probelmas de sociabilidad, de adaptación familiar, etc. Qué horror.

Poner como ejemplo el caso de Cho Seng-Hui, el asesino de la matanza de en Virginia Tech ("¡Oh, jugaba videojuegos!") y la cuña de la sicóloga me pareció gratuito y con cero fundamento. Flojo. Facilista.

Pero después la cosa mejora. O al menos deja el tema en un punto algo más positivo y "choro". La historia del matrimonio gamer me pareció tierna, los planes de mi amigo Pablo Aguayo para hacer un club de flippers me parece loable y la revista que apareció entre medio se veía bonita.

La lata son los sentimientos encontrados. Porque es agradable ver que los medios le den más cobertura al tema; pero al mismo tiempo, enerva ver la liviandad y la flojera de otros. Un poquitito más de rigor, por favor (al parecer, no estoy solo en esto). Los videojuegos son buenos. Y ya basta de meter miedo con la cuestión.

Leer más

Flippers·Videojuegos

The Twilight Zone: Dimensión Desconocida Flippera


No he parado de darle vueltas al tema flipper. Pienso en playfields todo el rato. Sobre todo, después de esa magnífica velada en acaso el mejor salón privado (por ahora) de máquinas en Santiago. Que maravilla de lugar. Y como mi fantasiosa mente no para de, bueno, fantasear, me imaginaba: si pudiera escoger cualqueira de las máquinas que allí había, ¿con cuál me quedaría? Pues me quedaría con ésta, la Twilight Zone.

Desarrollada por la Bally/Midway en 1993 y basada en la sensacional y adictiva serie creada por Rod Serling (el tipo que aprece de brazos cruzados) a fines de los cincuenta, ésta generó una audiencia de culto que incluso vio replicada y actualizadas sus historias con una nueva versión, más moderna, que se transmitió en los ochenta, vía Canal 13 (los martes a las 22 hrs. si la memoria no me falla).

La máquina viene a ser parte de una serie de pinballs creados a partir de series de TV o películas a comienzos de los noventa llamados SuperPin. En esta misma categoría estaban el Indiana Jones (¡GRAN favorito!), el Judge Dredd y el Star Trek: The Next Generation, entre otros. Estas probablemente sean mis máquinas favoritas. No sólo por lo entretenido del playfield -llenos de recovecos, rampas, y pasajes secretos- sino que además por los efectos de sonidos, música y claro, la pantalla de matriz de punto donde se replicaban las animaciones, el puntaje y cómo no, el "video mode".

The key that unlocks the door to your imagination: pocas veces he podido disfrutar un flipper tan entretenido como el Twilight Zone. Todo era fascinante y misteriosillo. Como la vida (saaaa!)


Pero el Twilight Zone tenía tanto más. Desde la bola de chicle (el inolvidable "gumball"), el famoso The Power (donde se "batallaba" en el nivel superior con imanes empujando la bola) y bueno, todos los distintos modos y chiches dentro de la máquina.

Una delicia con entretención garantizada por muchos, muchos meses. Una joya. ¿Ustedes, algún flipper favorito? O quizás algún capítulo de… La Dimensión Desconocida?

Leer más

Clásicos·Flippers·Videojuegos

Shangri-La Pinball

La noche del sábado fue simplemente de felicidad absoluta. Un carrete cualquiera que terminó transformándose en lo que de seguro va a ser una de las experiencias del año. La historia va más o menos así. Pablo Aguayo es un tipo que esa noche cumplía 37 años.

Y para celebrarlo decidió nada menos que realizar su cumpleaños en un salón con 30 flippers. Pinball y videojuegos. Su colección personal. Una cosa única. E invitó a un puñado de amigos, además del suscrito (una vez más, se agradece).

 
Las máquinas eran todas originales, en excelentísimo estado (de verdad, cero fallas, cortesía del socio de Pablo, Pancho Suárez), cada uno con su respectivo gabinete y con una variedad que llegaba a quitar el habla.

Desde el rarísimo e hipnótico Video Pinball (un "simulador" de flipper con background dibujado y luces LED hecho por Atari en 1978), al Time Pilot original, a un gabinete M.A.M.E. fácilmente manejable con cientos de roms originales. O sea, jugar de a dos con el Double Dragon, Bubble Bobble o Golden Axe se podía. Con los flippers era lo mismo: desde clásicos electromecánicos como el Hot Tip, el Cleopatra o el Golden Arrow a modelitos más modernos como el Twilight Zone o el White Water. Uf.

Dos en Uno: jugar de a dos en un flipper como en el Bubble Bobble, como solía hacerse, es de esas experiencias que nunca pensaste volver a repetir. Pues estabas equivocado.

Todo esto, mientras desfilaban platos con tapaditos, snacks, fruta y el infaltable componente etílico. Los invitados, poco más 20 personas, estaban todos extasiados. Todo era demasiado perfecto e ideal. Un verdadero trip a la calle de los recuerdos. Porque, en serio, creo que esto es por lejos la experiencia más perfecta que he tenido para replicar un arcade desde la última vez que pisé un Delta.

Aguayo es un maestro, un ídolo. Él se considera un mensajero, un monaguillo que sólo busca y desea que otros -como uno- puedan disfrutar del placer de jugar un buen flipper en buen estado. Pero su cruzada, para mi gusto es más bien mesiánica. Loable. Realmente loable. Desde esta tribuna, le mandamos un fuerte aplaudo (de pie) a este muchacho que simplemente cfree que el pasado no tiene por qué morir.

Leer más

Películas·Videojuegos

Star Wars: The Video Game Retrospective

Se sabe, el mundo ñoño se divide entre Jedis -fanáticos acérrimos de la saga de La Guerra de las Galaxias– y Trekkies -amantes aboslutos de todo lon que sea refrido a Star Trek, Viaje a las Estrellas-. No hay términos medios. Es blanco o negro. Personalmente, me inclino por el bando jedi. Entrar en la discución en este caso no vale la pena; además, existen montones de lugares donde se puede hacer. Acá venimos a hablar de videojuegos, caramba.

Pues bien, ideal para ver después el almuerzo, esta pequeña retrospectiva de cerca de 28 minutos recrea las distintas versiones de la saga Star Wars en la historia de las consolas caseras. Está todo, muy detallado, con un certero análisis (los libretos son muy buenos) y hasta saludables dosis de humor y freakeríos varios. A pito de casi nada, pero muy entretenido.

(Si quedan con ganas de más, el mismo sitio tiene un justo top ten con los mejores juegos basados en la saga)

Leer más

Listas·Películas·Videojuegos

Sugerenciads de Juegos para MirageMan

Sí, el mismísimo Mirageman (de civil, la máscara estaba en la lavadora) me pilló desprevenido, con cara de "villano", y me hizo una inocente llave que casi me despacha al otro mundo (nótese el color violáceo de mi rostro).

Porque claro, Mirageman finalmente ya está en cines y revolucionando a todo el país. Con campaña viral, presencia en Facebook y un potente boca-en-boca, la película lentamente se va ganando el corazón de un país cansado de ver más de lo mismo con las típicas películas chilenas. Es que hacía falta. Y chao no más con la vieja escuela del cine chileno. Más apolillada, imposible. Si no, a quienes hablen en contra, les podría suceder lo que me sucedió a mí…

Pues bien, la excusa para hablar de Mirageman es que, más allá de que la película y el personaje pidan a gritos que sean trasladados al fantástico mundo de los videojuegos, hay varios títulos de justicieros anónimos y no tanto. Los clásicos de pelea. No los one-on-one tipo Street Fighter, Tekken o Mortal Kombat. No, no, no.

Me refiero a los verdaderos beat’em ups. Esos que el personaje avanza etapas entre combos y patadas para rescatar a la chica. Como el Kung-Fu Master o el Double Dragon. Pero hay más, muchos. Así que vayan algunas sugerencias favoritas y personales para que Mirageman practique además combos y patadas virtuales:

  1. Kung-Fu Master (Irem, 1984)

    No tengo recuerdo de otro título que asuman el contenido básico de un beat’em up. Bueno, mal que mal, fue de los primeros: Un héroe solitario -Thomas- que avanza distintos niveles, con distintos villanos, hasta llegar a la última etapa en donde rescata a su amada, Sylvia. Si bien el juego fue creado con influencias de esa gran cinta con Bruce Lee llamada El Juego de la Muerte, la fuente directa es una comedia de Jackie Chan llamada Wheels on Meals, del mismo año. Mirageman (incluso Kiltro) perfectamente pueden tomar este juego como referencia directa.

  2. Knuckle Joe (Seibu Kaihatsu / Taito, 1985)

    Desconocido juego que recuerdo jugar en el Delta 3 de los Dos Caracoles. De hecho, buscando info sólo pillé al mono de Kirby, pero nada que ver. El original en todo caso aplica perfecto: en una urbe seudo futurista, un tipo con calzas y sin polera, dios, ni ley, reparte combos y patadas cual metralleta a los patos malos de rigor.

  3. Double Dragon (Technos Japan, 1987)

    Probablemente el beat’em up más popular de todos. pero si hasta lo hicieron película con el malo de Temrinator 2. Era un porquería, pero igual. Creo que fue el pimer juego co-op que conocí. Bunas combinaciones de combos y patadas (como el siempre eficaz ‘codazo’), grandes malos (y villanas con látigos!) y el mejor comienzo de un videojuego para la época: los malos le pegan un golpe al estómago a tu chica y se la raptan. Directo al mentón. It’s go time.

  4. Dragon Ninja (Data East, 1988)

    Otro co-op de lujo, también conocido como Bad Dudes. Pero Dragon Ninja era más cool. En la historia, había que salvar al Presidente Ronnie (!) de un ejército de ninjas. Recuerdo haberlo terminado el juego junto a un amigo del colegio, en unos flippers de Viña. Creo que nos gastamos unos 6.259 fichas en el proceso. Pero fue una tarde imborrable. A la salida, me creía Van Damme.

  5. Final Fight (Capcom, 1989)

    El Final Fight es el último beat’em up que jugué harto en los flippers. Me gustaba que uno de los "héroes" era el papá de la mina raptada de rigor (de una originalidad) y el alcalde de la ciudad. Pero también estaban los malos más estrambóticos: desde la mina con mini y esposas a esos clones de Axl Rose que se llamaban… Axl! Acá ya se me confunden todos los de la misma onda: el Streets of Rage, el 64th Street, Captain Commando, etc, etc. Capcom abusó un poquitito de la fórmula al final. Y eso que el Street Fighter ya era furor…

  6. The Warriors (Rockstar, 2006)

    El último gran juego de combos y patadas para mi gusto. Basado en la película de culto de 1979 del mismo nombre dirigida por Walter Hill, este violento y estilizadísimo beat’em up ambientado en el sucio y decadente Manhattan de fines de los 70s debiera ser un remake. O Mirageman contra las variopintas pandillas de la cinta y ambientado en Nueva York. Qué peliculaza sería…

Leer más

Noticias·Videojuegos

¿Spy Hunter = Nuevo Pontiac?


Los mayorcitos de 30 seguro se acordarán del clásico Spy Hunter, de Bally Midway. Originalmente nacido en los arcades y trasladado a cuanta consola existió por esos días -la mayoría seguró lo jugó en el Atari 800XL-, el juego se hizo mundialmente famoso por lo entretenido que era, por las distintas armas y enemigos, y claro, por su inolvidable sountrack del tema de Peter Gunn, en versión 8-bits.

El Spy Hunter es de esos juegos que todo el mundo recuerda. Como el Montezuma, por ejemplo. Pero éste sí que tiene planes para que sea hecho película (parece). Y fue flipper. Y tuvo además su juego (horrible, eso sí) para PlayStation 2, antes de que saliera el filme, con la Roca como protagonista. Raro. Y como buen clásico, también lo puedes jugar online.

Y sí, también ha sido inspiración para comerciales televisivos. Como acá, donde el nuevo Pontiac G8 se pone los pantalones del clásico ochentero. Notable, ¿no? El auto, si tienes sobre 30 mil dólares, lo puedes pillar por acá. (Vía Joystiq)

Leer más

Flippers·Películas·Videojuegos

Weekend RoundUp 09/03/08: Edición Se Te Apareció Marzo

Este fin de semana no sólo me dediqué a darle finalmente como caja al Burnout Paradise (se viene reseña), sino que también aproveché de ver varias cosas relacionadas con videojuegos. Hay un montón de cosas, que iré comentando en su debido momento, cuando corresponda (tranqui). Vamos por parte:

  • The King of Kong: A Fistful of Quarters: Gran, gran documental -algunos lo han llamado una mini obra maestra– que ha pasado por montones de festivales y de hecho, fue estrenado comercialmente en los EE.UU. hacia fines del año pasado. Muestra cómo dos tipos -Billy Mitchell y Scott Wiebe- pelean por tener un logro en teoría inútil: el mayor puntaje absoluto en el clásico Donkey Kong.


La película comienza con la obvia vuelta a principios de los ochenta, cuando todo era más sencillo e inocente y Billy Mitchell, un geek de Florida que además tenía el récord en el Centipede (!), logra el puntaje más alto durante el boom del Donkey Kong. Corría 1982.

Al otro lado del país, en Washington, un recientememente desempleado Scott Wiebe decide matar el tiempo instalando un juego original del DK en su casa y superar el récord de Mitchell. Lo que sigue a continuación es más épico que Gladiador y Buenos Muchachos juntos.

  • Tilt: The Battle to Save Pinball: Esto sí me emocionó. De hecho, me gustó más que The King of Kong. Porque va al callo: el documental rememora el tristemente inútl plan que tuvo la Williams para mantener vivos los flippers con la inclusión del Pinball 2000, a fines de los noventa. Seguramente algunos de ustedes los jugaron en los Diana.

    Eran máquinas un tanto más pequeñas que un flipper tradicional, y que tenían la particularidad de reflejar imágenes y animaciones en 3D. Que eana atodo trapo. Lástima que el flipper en sí no lo era tanto. Sólo hubo dos hasta que todo se fue a la porra. El Revenge from Mars, obviamente una secuela al popular y genial Attack from Mars, salvaba bastante y las animaciones eran muy cómicas; y el Star Wars: Episode One, que era hediondo de fome, tal como la película. Y sería todo. Hasta ahí llegó el plan del Pinball 2000.

    El documental cuenta todos esos sabrosos detalles, de cómo la industria pasó de ser una mina de oro a, de un año a otro, caer estrepitosamente frente al gigantesco mercado de las consolas caseras. Obvio. Y una pena. Porque claqro, ningún operador estaba dispuesto a invertir las enormes cantidades de dinero que un flipper demandaba. Proque los flippers son casi como los autos a la hora de mantenerlos.

  • jPod: Probablemente lo más interesate de todo. jPod es originalmente una novela escrita por el canadiense Douglas Coupland, el mismo autor de Generación X y Microsiervos. O sea, algo cacha de la generación techie.


El libro -y la serie- cuentan las desventuras de un grupo de seis amigos veinteañeros y empleados de una empresa desarrolladora de videojuegos que prefctamente podría ser Electronic Arts. Es el sueño de cualquier aficionado a los vidoejuegos. Claro que la vida cotidiana en los cubículos de jPod no es tan paradisíaca como se podría pensar.

La Canadian Broadcasting CorporationCBC para los amigos y la televisora y emiosora radial más imprtante de Canadá- decidió producir la serie con la asesoría del mismo Coupland. Esta debutó en enero de este año con mucho éxito de crítica.

Pero lamentablemente, el rating no la acompañó y los ejecutivos decidieron cancelarla a las pocas semanas. Es decir, no pasará de su primera temproada. Una pena, porque la serie salvaba bastante. O sea, el libro es sumamente superior, pero como serie televisiva era muy original, fresca, disrtinta y tenía a los videojuegos como eje central. Qué mas se podría pedir.

Leer más

Noticias·Videojuegos

Toallas Invasoras del Espacio


No, nunca tanto. No es el título de una mala película B. Pasa que este año el sin par, legendario e inolvidable Space Invaders cumple 30 años desde que fue creado por Tomohiro Nishikado para la Taito, por allá por 1978.

Entonces, como la cosa este año se va a venir de seguro en grande, los preparativos ya comienzan. De seguro vendrán versiones remezcladas del juego original y una tonelada de merchandising apropiada. Como esto, veraniegas toallas inspiradas en los marcianos del juego. Yo inmediatamente me anoto con una, claro está. Mal que mal, tan sólo valen 20 morlacos y son 100% de algodón egipcio. La única lata es que estarán duisponibles a mediados de año.

Leer más

Noticias·Videojuegos

¿Records? Guiness los Tiene

¿Crees que pasas mucho tiempo frente a la tele o al monitor? Ja, seguro que no será nada comparado con las 38 horas y 30 minutos que acumuló Eric Furrer al frente de un Space Invaders en 1980. Y eso que sólo tenía 12 años.

Furrer, claro, ya tiene asegurado su rincón en el Guiness. Específicamente, en el Guinness World Records Gamer’s Edition 2008, libraco que obviamente está enfocado al mundo gamer, desde comienzos de los 70s, con las primeras consolas caseras, a las máquinas de última generación.

Yo lo he gritado hartas veces a los cuatro vientos y el editor del libro, Keith Pullin, me sigue: «La industria de videojuegos es el sector del entretenimiento que más rápido crece en el mundo». Aprendan.

Algunos botones de muestra:

  • Después del Space Invaders, el Pac-Man es el segundo juego más popular de todos los tiempos.

  • Sid Meier, creador del Civilization y fundador de la legendaria y hoy defunta Microprose, es la persona que más premios ha recibido en la industria.

Entretenido, ¿no? Claro que sí. ¿Más ejemplos? Gamespot tiene más botones de muestra. El libro va a estar disponible en Norteamérica a contar del 11 de marzo. La lata es que dudo mucho que alguna de las librerías locales se atreva a importar semejante volumen (que sí estará editado en español), pero bueh, siempre está a la mano Amazon.

Leer más

Clásicos·Flippers·Videojuegos

Peter Hirschberg es Dios


Soy un nostálgico recalcitrante. Los recuerdos que tengo pasando tardes enteras en el Galaxy Bowl de Apoquindo, al lado el Bowling, donde después funcionó la legendaria -gasp!- Rockola son imborrables. En los Delta, particularmente el 11 (en el Pueblo del Inglés), que estaba al lado de mi casa, o los Flamingo’s y, posterioremente, el Flipperlandia del Shopping de Vitacura. Grandes momentos de felicidad absoluta.

Amo los arcades. Amo esa específica ambientación de luces, ruidos, músicas, aire acondicionado y olor a electricidad. La adrenalina que significaba hacer la cola para comprar las fichas, introducirlas en el monedero y apretar start. Lo máximo. Pero claro, eso son sólo buenos recuerdos. Nada de eso existe por acá ahora. Una lata.

Pero este tipo, Peter Hirshberg, construyó al lado de su casa lo más cercana a ese nirvana electrónico. Se dio la lata de construir un verdadero arcade ochentero -el Luna City Arcade– con flippers y videojuegos de la época. La colección es sublime. Vean esas fotos, el video y hasta el blog que tiene del lugar. Notable. Quiero ser amigo de ese maestro. O mejor: vivir ahí.

Leer más