La franquicia del Dead or Alive es vieja. Y, se supone, popular. La saga comenzó en las salas de flippers como un aracde por allá poor 1996, como un juego pelea ‘one-on-one‘ al estilo Mortal Kombat, Tekken o Street Fighter que incluso tiene hasta un par de películas inspiradas en el juego (una de Takashi Miike, y otra más nueva y más hollywoodense). Desde entonces, ha habido varias secuelas y juegos basados en ese título original. Como éste, que la verdad no tiene mucho que ver.
Este título (que tiene el apellido “Xtreme”) es una variación que básicamente sitúa al jugador en un resort playero. El detalle es que los personajes del juego son puras chicas veinteañeras de origen multicultural que gozan de un esculpido físico y una voluptuosidad que dejaría pálida a cualquier de las argentinas festivaleras de por acá.
El juego y la historia en sí son bastante freak, como buen título de origen japonés. Mezcla de ‘party game’ (es decir, mini juegos) con algún The Sims, el objetivo del juego es pasarlo lo mejor posible en el paradisíaco y tropical resort playero de Zack Island. Eliges a una de las chicas y listo: puedes hacer lo que quieras durante el día, ya sea tomar sol en la playa o en la piscina, forjar amistades, ir de compras, jugar un partido de voleyball, andar en motolanchas y hacer carreras e ir al casino, además de hacer amigas en el lugar, entre muchas otras actividades que más allá de cautivar principalmente al público masculino por el nivel de detalle de los escenarios y particularmente de las chicas, el juego no ofrece mayores sobresaltos.
Visto de otra manera: gran asombro por la capacidad gráfica, desilusión por lo superficial del juego en sí. Al final, DOA es un título más para mirar que para jugar. Si tan sólo el stock de trajes de baño de las chicas es para quedar boquiabierto, y para qué hablar del ululante movimiento de sus pechos. ¿Juego voyerista? Y por qué no.
A mo-ver el coolo: créanlo o no, uno de los mini juegos del DOA es una pelea de potazos en medio de una piscina. Uf.
Todo lo anterior, adornado con una banda sonora extremadamente veraniega, happy y playera que incluye a gente como Big Mountain y Hilary Duff transforman a DOA Extreme 2 en una divertida –aunque breve– experiencia voyerista digital o en el juego más gratuito de la historia.
El juego obtuvo una claidfifacion de 53 en Metacritic. Ninguna sorpresa. Y la página oficial de la serie está por acá. Finalmente, como regalito, el trailer del juego (muy recomendado) que resume el carácter del jueguito. Y si el fanatismo se vuelve obsesión, acá hay un foro que también le puede gustar a los más cochinones.
Leer más